Se ha ido el hormigueo,
-no queda nada-
desapareció de mis dedos,
-y mi espalda-
y con él,
el ardor
-y su rastro-
Porque todas las heridas,
todos los dolores,
todos los tatuajes,
todos los golpes,
sanan,
sanan y PICAN,
pican desde adentro,
pican hasta afuera,
ta-la-dran,
como un mar de hormigas,
-furiosas-
que corren aceleradas
-por las venas-
con coraje,
y pica,
pica hasta el delirio,
pica hasta la locura,
pica hasta el desespero,
pero al final
sana,
sana
y una se hace nueva.
1 comentario:
Y asi es... "uno se hace nuevo".
Publicar un comentario